
Cada día caminamos innumerables horas sorprendentemente relajados y cómodos en esta ciudad que sentimos acogedora y afable. Hay gente que se aturde en las grandes ciudades (Humphrey es a veces uno de ellos). Para mí las ciudades grandes y diversas son lugares mágicos con miles de rincones que explorar. De los lugares que visitamos me enamoré de el barrio del SoHo y Humphrey y yo disfrutamos como niños recoriendo Central Park. Nos quedaron cosas por ver, pero Neva York es una de esas ciudades interminables a las que uno no sólo debe ir una vez en la vida, pero debe volver cuantas más pueda.