Felices Fiestas!

Dentro de cuatro dias salimos para España. Yo hace dos años que no voy asi que ganas no me faltan.

Nos vemos por aqui a la vuelta.

¡Felices fiestas y mis mejores deseos para el 2008!

De vuelta

Bueno, pues ayer llegué después de pasar cuatro dias en Miami. La experiéncia ha sido totalmente surrealista. Para empezar me fui de Chicago justo el dia después de una tormenta de nieve. Dejé atrás un paisaje blanco y frio para llegar a uno dorado y cálido. A dia 6 de diciembre, Miami disfrutaba de 29º C a la sombra. Pero bueno, lo del cambio climático, aunque chocante era esperado. Lo más surrealista del viaje fue la ciudad en si. Miami es una mezcla entre lujo decadente y una pobreza terrible. Mujeres delgadas y altas, con enormes pechos postizos, pieles tostadas, vestidos cortos y tacones de aguja, pasean de la mano de hombres musculosos, pieles brillantes, y cadenas de oro colgando de sus cuellos a la vez que en la misma calle bagabundos con ropas rotas y sucias buscan un rincón en la acera mugrienta para pasar la noche. En Miami todos los bares tienen Happy Hour cada dia de la semana y la cultura hispana (predominantemente cubana y argentina) domina el ambiente. Pero Miami, con su buen clima y extraño ambiente, es un lugar que desinive y si a eso le añadimos que la ciudad alojaba este fin de semna 25 ferias de arte atrayendo a artistas, galeristas, coleccionistas y amantes de las artes en general provienientes de una gran diversidad de partes del mundo, Miami ha sido la mezcla perfecta para conocer gente y divertirse.


Asi que después de cuatro dias de trabajo intensivo, sin mucha suerte en cuanto a ventas se refiere, Anni, Meghan y yo celebramos la ultima noche en Miami tomando unas copas y paseando por la ciudad y la playa hasta las 4 de la mañama. Anegdota de la noche: después de colarnos a tomar algo en el hotel Delano y cuando ya nos echaban porque cerraban el bar, perdí a Anni y Meghan que iban un tanto contentillas. Cuando las encontré vi que se habian sentado a charlar con un tipo que también habia tomado unas copas de más. Nada más sentarme con ellos reconocí al hombre en cuestión pero media hora después, en el baño del hotel, descubrí que Anni y Meghan no se habian dado cuenta de que habiamos estado hablando con el actor Gary Dourdan de ¡CSI Las Vegas!